Acabamos de observar, con sumo pesar, que habeis decidido continuar vuestra "mision evangelizadora" por las tierras rusas con el hundimiento de nuestros barcos en el Báltico. Pensabamos que los caballeros Teutones, honrando el código de caballeros de los europeos,se comportarían de manera honorable, pero por lo visto no son más que unos fanáticos asesinos que buscan una frágil excusa en la cruz para matar a sus hermanos cristianos. Ya que vos no habeis tenido el honor ni la decencia de haberme declarado la guerra de manera formal, lo hago yo, Isevolod, Gran Duque de Novgorod.