Dejando aparte los bugs, caidas al escritorio y demás, yo creo que no han sabido/podido/querido aprovechar al máximo el motor del juego.
Yo lo hubiera hecho de manera que la mayor parte de los turnos transcurrieran en paz, pero preparándose económica y militarmente para la guerra. En esos turnos se verían movimientos diplomáticos, espionaje, producción a marchas forzadas, reclutamiento masivo, etc, todo ello dirigido a una guerra corta pero intensa, con pocos enfrentamientos pero entre ejércitos masivos. La guerra tendría como objetivo, precisamente, la destrucción del ejército enemigo, no la toma de su territorio. Mientras ese ejército subsista, la toma de cualquier posición (capital, ciudad, puerto) enemiga debería costar un cierto esfuerzo por el levantamiento civil en armas, algo que no se debería producir por desmoralización nacional si el ejército es aniquilado o sus fuerzas reducidas a la mínima expresión. Si a pesar de todo se conquistan algunos de esos lugares, su posesión debería servir como posición de fuerza en la negociación posterior.
Una vez eliminado el ejército enemigo, el vencedor reclamaría prebendas, como recibir un porcentaje de los ingresos de comercio del vencido, o la obligación de que el vencido dedique una ruta comercial al vencedor, o que se pueda establecer un fuerte con guarnición en su territorio, con paso libre de tropas, o que se puedan utilizar los puertos del vencido para reparar barcos, mil posibilidades interesantes en lugar del simple "conquista y hazlo tuyo".
Esta situación sería distinta en zonas de colonización, donde el sistema de conquista sí funcionaba. Nadie (en Europa) se alteraría si se aniquila a los cherokis o los iroqueses para conseguir sus territorios y ahí sí tiene sentido el conquistar la capital, dominar tierras y poder utilizar sus recursos naturales.
¡Ah, es como si estuviera ya jugando a este juego! :roll:
Edit: se me olvidaba comentar el tema de los agentes. Se nos vendió la moto de que se iban a reducir, pero al final no han podido evitar ponerlos en el mapa. Yo el espionaje, los sabotajes y la cuestión religiosa los hubiera puesto también en paneles, como la diplomacia.