Creo que tienen muchos razón en criticar un excesivo peso en los dados. Con los fusiles puedo llegar a entenderlo, una buena puntería era difícil de conseguir, de ahí que la corta distancia, la concentración de bocas de fuego (razón del aprieto de las formaciones en batalla de la época) y el apuntar hacia la mitad inferior de la formación sean tópicos en las batallas (si todo esto se cumple, la unidad que dispara debería hacer muchísimo daño al enemigo, no tanto como para ponerlo en desbandada, peró sí el suficiente como para comprarlo con las bajas de una andanada de soliferrea a no mucha distancia del ITW).
Pero estamos con cañones y barcos, y si bien la puntería era también difícil de conseguir, pasa lo mismo: la distancia es determinante, si un barco está muy cerca deberíamos poder apuntar hasta a ojo y no fallar. Y evidentemente, el caso no está en que si hay 3 barcos rodeando se naga más daño, si nó que cada uno hace el suyo y el justo, de manera que el daño a esa distancia se multiplica por tres.
Vamos, que la han cagado con eso. A no ser que si las tropas ganan experiencia, ganen puntería y los dados tengan cada vez menos peso. En cuyo caso se puede excusar, pero no en su totalidad. El hecho de reclutar una unidad, significa que ya lleva unos estándares de efectividad, adecuados a cada tipo de unidad (en batalla debería ser muy diferente la puntería de unos milicianos que de un batallón de línea).