Bienvenidoz.
Zoy el embajador y humilde zervidor de mi zeñor, el gran lider de la faczion de loz Orkoz de laz montañaz Mizticaz, el feroz gran jefe Uglag. El gran Melkor lo tenga en zu gloria por muchoz zigloz.
Zabed que mi zeñor ez corto de palabraz, y yo zere vueztro interlocutor. Zomos una gran nazion, poderoza y aguerrida, pero la materia griz ze noz zalio de la cabeza manchandonoz el cuerpo, y no dizponemoz de diplomaticoz cultoz que enviar a vueztroz territorioz.
Vueztroz diplomaticoz zeran bienvenidoz para zentaroz a nueztra meza, eztablezer lazos comerzialez, e intercambiar regaloz, zaldremoz todoz muy complazidos; pero al ziguiente turno debereiz abandonar nueztraz tierraz o pazareiz a adornar nueztraz bandejaz de poztrez.
Acomodaroz, bebed y domir, zi nezetitaiz cualquier coza, o recuperar vueztraz cabezas... no dudeiz en llamarme. No oz imaginaiz lo zerca que eztoy.