Una Jihad ha sido declarada contra las antiguas posesiones de Al-Andalus.
Los guerreros venidos del norte de África, destinados en un principio a la defensa de Marrakech han sido enviados al combate contra el rey castellano tras saberse que este utilizaba las informaciones que tenía de la corte cordobesa para trasladarlas al rey de Sicilia, con él que ahora nos une una firme paz y convivencia, por largos años firmada.
Al enterarse el califa montó en cólera, ya que tenía al rey castellano por hombre de honor y a pesar de haber estado este en diversas situaciones adversas nunca se aprovechó de las circunstancias. Las tropas fueron rápidamente enviadas al norte y un fervor religioso inundó a las huestes al saber el motivo de la guerra…una puñalada por la espalda hubiera caído si la guerra se hubiera alargado contra el rey Klu.
Cuando el califa esperaba poder licenciar sus tropas y dedicarse a la expansión comercial de sus mercados se enteró de la hiena que anidaba en el corazón de su vecino y la rabia hizo que los imanes de todos los minaretes de Córdoba a Argel pidieran guerra al infiel…
La guerra entre Sicilia y Al-Andalus se produjo entre dos reyes jóvenes, valerosos y algo impetuosos pero también hombres de honor que cruzaron sus espadas de la forma más noble. La hiena castellana sólo esperaba que uno de los dos, o ambos, se desangraran, para aprovecharse de los restos. Esto enervó por igual a ambos reyes que decidieron no ser marionetas de nadie y forjar su propio destino, de momento caminado por la misma senda…
Quien no quiso más que guerra entre sus vecinos la tiene ahora a las puertas de su castillo…
ALLAH AKBARRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRR